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jueves, 17 de noviembre de 2011

LA CATEDRAL DE NOTRE DAME

La catedral de Notre Dame de París (1163-1225) es el arquetipo de la catedral gótica


Es, sin ninguna duda, uno de los símbolos de la ciudad. Si bien no es la catedral más grande de Francia, es una de sus obras de arte gótico más remarcables.

La fachada presenta tres grandes portales. El Portal del Juicio Final, el más importante al centro, muestra esculturas representando la resurrección de los muertos, un ángel con una balanza pesando virtudes y pecados y demonios que se llevan las almas pecadoras, imágenes que sin duda habrán tenido gran peso en el inconsciente popular en la Edad Media. Los dos portales laterales fueron consagrados a la Virgen María y a Santa Ana, su madre.

 A unos 20 metros del suelo, una galería con 28 estatuas se levanta por encima de los portales. Cada estatua, de 3,5 metros de altura, representa los 28 reyes de Judea que precedieron la llegada de Cristo.




La edificación coincidió con un período de prosperidad y de creciente dominio de la ciudad, por lo cual la obra debía reflejar este poderío. Así, la edificación se realizó sin interrupciones por problemas económicos, aunque sólo se dio por concluida a mediados del siglo XIV, después de muchas modificaciones e intervenciones de diferentes arquitectos y artesanos.

Las turbulencias de la historia, el deterioro por el paso del tiempo y las nuevas tendencias arquitectónicas hicieron que la Catedral sufriese numerosas modificaciones y restauraciones.





 Aqui os dejo un fragmento de esta maravillosa historia de Victor hugo:






"Frollo, atraído por la bailarina, pide a su protegido Quasimodo que la rapte. Sin embargo, la intervención del capitán Febo impide la consumación del secuestro y lleva a Quasimodo a la condena del suplicio público.

Es azotado en la plaza, y recibe todo el odio y los insultos del pueblo, que lo detesta por su fealdad. Quasimodo pide agua:

–¡Agua! –repitió por tercera vez Quasimodo.

Entonces vio cómo se apartó el gentío. Una muchacha curiosamente ataviada salió de entre la gente. Iba acompañada de una cabrita blanca de cuernos dorados y llevaba una pandereta en la mano.

El ojo de Quasimodo centelleó. Era la bohemia a la que había intentado raptar la noche anterior, fechoría por la que comprendía vagamente que estaba sufriendo aquel castigo, lo que, por otra parte, no era cierto ni mucho menos, pues se le estaba juzgando por la desgracia de ser sordo y por haber sido juzgado por un sordo. Estaba seguro de que también ella había venido para vengarse y darle, como hacían los otros, su golpe correspondiente. […]

Ella, sin decir una sola palabra, se aproximó al reo, que se retorcía en vano para librarse de ella, y soltando una calabaza que a guisa de recipiente tenía atada a la cintura, la acercó muy despacio a los labios áridos del desdichado.

Entonces, de aquel ojo tan seco y encendido hasta entonces, se vio desprenderse una lágrima que fue lentamente deslizándose por aquel rostro deforme y contraído hacía ya mucho rato por la desesperación".
¡¡¡Un saludito!!!.

Laura.


Este gran monumento es modelo de la gran obra de Víctor Hugo quien escribió en 1831 su novela "Notre Dame de París". Situando los acontecimientos en la catedral durante la Edad Media, narra la historia de Quasimodo, el jorobado que se enamora de la bella gitana Esmeralda y sufre el hostigamiento de su tío Frolo. Su ilustración poética de la arquitectura de la catedral permitió a muchos descubrirla de una forma diferente.



Sobre el portal central se destaca el gran vitral circular de la roseta, de casi 10 metros de diámetro, uno de los elementos más notorios de la fachada. Sin embargo, este vitral no es el más grande de la catedral, ya que las fachadas norte y sur presentan vitrales de 13 metros de diámetro. Por encima de la roseta, una hilera de columnas y luego las dos torres con campanario completan la cara oeste.



Destacan también la grandes figuras protectoras de la catedral, Las Gárgolas, quienes se asoman desafiantes en las cornisas de estas grandes catedrales góticas. Monstruos infernales, muecas burlonas o animales dantescos cuyo objetivo es custodiar el recinto sagrado de los embates del Maligno. Son las defensoras pétreas, depositarias del encargo divino...



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