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martes, 4 de octubre de 2011

EL NACIMIENTO DEL ARTE


--EL NACIMIENTO DE VENUS--


Para mi segunda entrada, he visto conveniente adaptar uno de los cuadros mas bellos del siglo XV del gran Botticelli: "El nacimiento de Venus", con la que trato de daros una cálida bienvenida y pretendo haceros reflexionar sobre los distintos aspectos que puede proporcionar esta gran obra y, a su vez, despertar los pequeños secretos que el maestro Botticelli pretendía guardar en el momento de crear su obra.

¿Qué podemos ver?¿Qué nos puede llegar a trasmitir?

Cuenta la leyenda, Venus, la diosa del amor, que su nacimiento se debe a los genitales del dios Urano, cortados por su hijo Cronos y luego arrojados al mar.

Botticelli nos muestra  el momento de la llegada de la diosa, instante en el que Venus emerge del mar con una delicada desnudez, sobre una concha, la cual flota en un mar verdoso.
Sus largos, delicados y dorados cabellos cubren gran parte de su cuerpo, y, si observamos, con su brazo derecho, trata de manera delicada e inocentemente de taparse sus pechos.


A la izquierda, podemos obervar a una pareja fuertemente abrazada, ellos son el dios del viento, Céfiro, y la diosa de la brisa, Aura. Ambos tratan de arrastrar o impulsar a la diosa del amor hacia la orilla. Estos personajes simbolizan la unión de la materia y el espíritu. Si nos fiajmos más atentamente, a su alrededor, caen rosas, las cuales se convertirán en seres.



 A orillas del mar, en la zona terrestre, se encuentra una de las diosas de las estaciones, concretamente La Primavera, pues lleva un traje floreado. Esta diosa está a  la espera de Venus ofreciéndole una capa con motivos florales para cobijarla en el momento de sullegada a la orilla. La forma de vestir de la primavera nos da pistas de su identidad pues lleva un cinturón de rosas rodea la cintura de la hora y en el cuello luce una elegante guirnalda de mirto, el cual es el símbolo del amor eterno, su traje blanco bordado  representa a la primavera, conocida como la estación del renacer.





Por  todo esto, entre los pies  de la diosa Venus, va floreciendo una anémona azul con motivo de su nacimiento. Los árboles forman parte de un pequeño bosque de naranjos en flor, esto corresponde al sagrado jardín de las hespérides en la mitología griega. Un detalle rescatable es que los ropajes se caracterizan por tener una gran marcación de pliegues.
Finalmente, por si os ha interesado esta pequeña entrada y os ha dejado con la miel en los labios os dejo un video donde se observan los detalles de la obra con más detenimiento:

Espero que os haya gustado.
¡¡Hasta pronto!!
Laura.

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